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Esto es lo más destacado de la residencia de verano del Papa.
Este retiro papal de verano fue diseñado por Carlo Maderno para el Papa Urbano VIII en el siglo XVII. El Palacio Apostólico abrió sus puertas al público en 2016, cuando el Papa Francisco decidió renunciar a él como residencia y eligió una casa de huéspedes de la Ciudad del Vaticano. El Palacio Apostólico se ha convertido ahora en un museo que cuenta con artefactos relacionados con el Vaticano, como los trajes y coches de antiguos papas. Los visitantes tienen acceso a los apartamentos papales con suelo de mármol, la galería de retratos papales, el despacho de verano e incluso el dormitorio privado.
Construidos en los terrenos de la espléndida villa romana del emperador Albanum Domiciano, los Jardines Barberini son una amalgama de ruinas arqueológicas, lujo y belleza natural. Es un fiel reflejo del estilo tradicional de los jardines italianos, con sus cuidados laberintos de setos, hermosas fuentes, deslumbrantes parterres geométricos y esculturas y ruinas antiguas. Los Jardines Barberini están abiertos al público desde 2014. Al igual que el Palacio Apostólico, están cerrados los domingos y para entrar es necesario reservar previamente.
Más informaciónLos Jardines del Belvedere, que significan "hermosa vista", también se construyeron en los terrenos del emperador Domiciano. Aquí se encuentra el famoso criptopórtico o pasillo cubierto del emperador. Decenas de plantas y enredaderas se arrastran contra él, pero la proeza arquitectónica de su diseño es claramente visible al entrar. De hecho, este pasillo cubierto de 300 metros de largo servía de sombra cuando Domiciano salía a pasear, y también fue el responsable de dar cobijo a los que se refugiaron de los nazis en Castel Gandolfo.
La Granja del Papa, situada en el interior del palacio, es una granja familiar de 50 acres que produce todo lo que come el Papa. Diariamente se envían al Vaticano productos frescos como quesos artesanales, pecorino, mozzarella, ricotta, yogures, huevos, leche, coliflor y brócoli. Esta granja ecológica está muy bien cuidada y cuenta con más de 1000 olivos. Estos árboles son parte de la Historia ya que la mitad de ellos lleva en pie desde el año 1200. También se puede pasear por varios huertos y viñedos del recinto.
En el interior del Palacio Apostólico de Castel Gandolfo, podrás ver su rico mobiliario y decoración. Observa la galería de retratos papales y visita la sala de los novios, andmira las estatuas y los cuadros de los antiguos papas, el salón del reloj y la sala del trono. Una de las 20 salas con suelo de mármol de los apartamentos papales es la galería de Alejandro VII, donde encontrará un busto del difunto Papa Juan Pablo II. Incluso podrás ver el dormitorio del Papa, que se cree que fue utilizado por varias mujeres judías como sala de partos durante la Segunda Guerra Mundial.
El Palacio Apostólico del siglo XVII, que domina el lago Albano, era la residencia de verano del Papa. El primer Papa que lo utilizó como residencia de verano fue Urbano VIII en el siglo XVII. Desde entonces, ha sido utilizado por unos 15 Papas para escapar del calor del verano romano. Sin embargo, en 2016, el Papa Francisco decidió renunciar a utilizar el palacio, por considerarlo demasiado ostentoso, y prefirió pasar el verano en su casa del Vaticano. Desde que se abrió al público, nadie reside en el Palacio Apostólico de Castel Gandolfo.
Sí, tus entradas para el Palacio Apostólico de Castel Gandolfo te permitirán acceder a la anterior residencia privada de verano del Papa. Disfruta de las vistas de las brillantes aguas del lago Albano y de la verde campiña. Además del Palacio Papal en la tranquila ciudad de Castel Gandolfo, podrás explorar los exuberantes jardines de Villa Barberini y los Jardines del Belvedere. Con la ayuda de una audioguía, podrás descubrir y comprender mejor el significado de la residencia de verano del Papa.
De enero a marzo de 2022
El Palacio Papal está abierto de lunes a viernes, de 8:30 a 14:00. La última entrada es a las 13:00. Los sábados, el palacio está abierto de 8:30 a 17:30 horas. La última entrada es a las 16:30.
Cerrado: El palacio permanecerá cerrado el 11 de febrero, el 19 de marzo y los domingos.
Por lo general, se necesitan al menos 2 horas para recorrer el Palacio Apostólico de Castel Gandolfo.
Se encuentra en Piazza della Libertà, 00073 Castel Gandolfo Roma, Italia.
Encuéntralo en el mapa
Puedes llegar al Palacio Apostólico de Castel Gandolfo en tren, autobús o en coche.
Desde la estación Termini de Roma, Castel Gandolfo está a unos 40 minutos en tren. Baja en la parada de Castel Gandolfo y camina en dirección a la Piazza della Liberta y de allí hasta la entrada del palacio.
Sí, puedes ir en autobús desde el punto de Anagnina en Roma hasta Castel Gandolfo. Aunque los autobuses son menos frecuentes, llegarás bastante rápido.
Sí, la fotografía está permitida. Sin embargo, no se permite el uso de flash, trípodes o palos de selfie.
No, no hay posibilidad de dejar tus cosas en un guardarropas con lo cual no puedes llevar bolsos y maletas grandes dentro, solo se permiten mochilas y bolsos pequeños.
No, no se permite el ingreso de alimentos y bebidas al interior del palacio. Allí hay un restaurante abierto a los visitantes.
Debido a los desniveles de los caminos y las escaleras, el recinto no puede acoger sillas de ruedas. Sin embargo, en el interior del museo hay rampas y ascensores para que los visitantes con discapacidades puedan desplazarse cómodamente.
Sí, el Palacio Apostólico está abierto a los visitantes en 2021.
Sí, puedes reservar ya tus entradas en línea para visitar el Palacio Apostólico y los Jardines.
Puedes visitar el Palacio Apostólico, los jardines pontificios adyacentes y, dependiendo de la entrada que elijas, puedes tener acceso a Villa Barberini y sus jardines.
No, necesitas entradas diferentes para visitar el palacio y sus jardines.
El palacio recibe a los visitantes los lunes y viernes entre las 8:30 y las 14:00 horas, con entrada final a las 13:00 horas, y los sábados entre las 8:30 y las 17:30 horas, con entrada final a las 16:30 horas.
Dado que el Palacio tiene una gran importancia religiosa e histórica, se espera que los visitantes vistan con modestia. No se permite llevar pantalones cortos ni camisetas sin mangas. Además, te recomendamos llevar calzado cómodo para que puedas explorar más fácilmente.