La ciudad-estado del Vaticano nació con la firma del Tratado de Letrán en 1929. Es un lugar de gran importancia religiosa y cultural, que atrae a millones de visitantes cada año. Por ser la sede de la Iglesia Católica Romana, tiene unas normas y reglamentos muy estrictos. Si estás planeando una visita al Vaticano, asegúrate de familiarizarte con estas directrices para que puedas disfrutar de un viaje sin contratiempos.